El testimonio de dos médicos cubanos que fueron inhabilitados para el ejercicio de su profesión durante más de cinco años por canalizar ante su Ministerio inquietudes salariales de 300 profesionales de la Salud Pública. El Dr. Jeovany Jimenez Vega autoriza y agradece la divulgación de toda opinión o artículo suyo aquí publicado.

En tierra de nadie.

48Por: Jeovany Jimenez Vega.

A dos conclusiones básicas me ha conducido la vida. La primera sentencia: que la solución a los gravísimos problemas del mundo no será el capitalismo, pues aunque dispara la creatividad y el espíritu emprendedor, es también un sistema excluyente y exacerba los instintos más primitivos del hombre. Para que unas pocas decenas de países detenten un status económico holgado deben existir, según este esquema, más de 150 en un estado de pobreza más o menos dramática –dinámica vigente tras varios siglos y que persiste con relación a la estratificación social dentro de cada país– y dada su naturaleza especulativa, se ha demostrado incapaz de evadir las periódicas crisis que le caracterizan. Este esquema no ha logrado librar al mundo de las hambrunas y su variante neoliberal sólo terminó por acumular el poder político y económico en un bloque selecto de naciones que convirtieron a las instituciones mundiales en un casino que articula las estrategias de dominación contra los países más pobres. El capitalismo se me antoja en etapa intermedia o escalón de paso, necesario tal vez, pero nunca meta final de la especie humana.

Una segunda sentencia: la solución tampoco es el socialismo de cuartel, secuela del modelo soviético, cuya variante stalinista produjo nefastas consecuencias sobre la individualidad del hombre. Después de 50 años de aplicación este esquema destruyó la economía de mi país, sometió a mi pueblo a una constante e injustificada carestía a la vez que, frontalmente opuesto al espíritu emprendedor del hombre y a su libertad de expresión, generó un nauseabundo clima de inmoralidad. Si la Revolución cubana triunfó para acabar precisamente con los privilegios de clase, sin embargo, medio siglo después persisten aún castas que viven por encima de la Ley y que disfrutan de prerrogativas negadas al común del pueblo; aún hoy persisten en Cuba clases sociales bien estratificadas –exclusividad que algunos ideólogos adjudican al capitalismo pluripartidista– porque si alguien percibe 100 veces más ingresos que un médico y lo mira por encima del hombro es porque siente que pertenece a un estrato social diferente.

Así de momento sólo irían quedando a considerar hasta cierto punto las sociedades regidas por la socialdemocracia, pero a pesar de que llegan a ostentar envidiables niveles de vida y de seguridad social, tampoco éstas quedan exentas de la corrupción política, ni escapan a las consecuencias de crisis capitalistas como la actual, que dejó al mundo en bancarrota cuando reventó la burbuja.

Cuando me aventuro a estas neófitas meditaciones –muy personales, por cierto– piso terreno minado y corro el riesgo de quedar varado en tierra de nadie, pero aseverar otra cosa sería deshonesto de mi parte o sería especular sobre asuntos que nos quedan demasiado lejos en el tiempo. El nombre no definiría la esencia, pero llámese comunismo, Proyecto Venus o el Reino de Dios sobre la tierra, me refiero a esa sociedad futura en la que todos desearíamos vivir –lo cual nos convertiría a todos potencialmente en comunistas, venusianos o cristianos– donde un hombre emancipado del egoísmo por fin pensaría en el prójimo como en sí mismo; un mundo sin carestías ni guerras, generador de una avanzadísima tecnología que estaría exclusivamente en función del progreso humano; un futuro donde los estados quedarían suplantados por una supraestructura que armonizaría los pulsos de una sociedad global única en medio de una paz universal. Pero para eso antes el hombre debe renacer. Ese hipotético mundo –que sí sería la solución definitiva– aún no se vislumbra, está situado más allá del horizonte y de cualquier modo queda por ver si sería posible durante los próximos 500, 1000 o 2000 años, y esto sólo si escapamos de la aniquilación a que nos amenazan la codicia y la estupidez humanas.

Nunca el hombre conoció mejor su mundo, nunca lanzó una mirada más recóndita al universo o más profundo en la intimidad de una célula, y sin embargo nunca tuvo más pobreza espiritual ni se conoció menos a sí mismo; nunca estuvo más indefenso ante sus propios demonios. De ahí concluyo que el próximo salto debe ser cualitativo: será una profunda transformación ética la que estará llamada a salvar al hombre. De momento estas son sólo quimeras para un ser que aún arrastra demasiadas miserias. Pero algo ya sucederá que nos devuelva la humildad y nos recuerde que sólo somos efímero polvo de estrellas dejado por un azar de Dios navegando en el espacio. Aunque si después de todo el fin del mundo no llegó, tal vez esto quiera decir que las olvidadas estirpes, condenadas a 100 siglos de soledad sí tendremos, por esta vez, una segunda oportunidad sobre la tierra.

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Comentarios en: "En tierra de nadie." (8)

  1. ¡Muchacho! Cuando tú seas grande y vivas en el mundo real te vas a asombrar de que eres quien escribió todo esto.

    Yo como tú, estudié Historia en Cuba. ¡Qué embarque! Y para rematar me fui a Ciudad Libertad donde unos rusos seguramente estalinistas, me dieron un largo y tedioso curso de Comunismo Científico que además se me ocurrió la gracia de aprobarlo con resultados sobresalientes.

    Cuando llegué a la Yuma navegando en mi propia balsa, creía que acababa de llegar al primer país capitalista del mundo, como tú crees ahora. ¡Mierda! Mierda perniciosa aprendida por mí en Cuba procedente del cerebro del vago habitual Carlos Marx, reforzada y tergiversada con la telera de mentiras del Líder Histórico.

    Estados Unidos no es un país capitalista, ni socialista, ni nada de eso. Estados Unidos es un país; una nación muy multirracial y extremadamente libertaria. Nada que ver con sistemas sociales de manual y por recetas, elaborado en la cabeza de alguien. Los propios americanos lo llaman “the melting pot”, con lo cual quieren significar un crisol de razas y culturas.

    Ese es el primer y más grave error de los Castro; creerse que ellos pueden diseñar sociedades. Y diseñarlas sin tomar en cuenta ni siquiera el libreto de Marx, Engels y Lenin. No señor: lo hicieron según sus propios métodos totalmente experimentales.

    Sin embargo el que tu enfocas es un tema filosófico interesante y tu lo has abordado muy en serio. Veamos si podemos entregarte a Cuba libre lo antes posible para que nos expliques a todos otras intimidades de la materia que es lo que determina la organización social humana y sus capacidades de autosuficiencia, longevidad y conquista estelar que la puedan preservar de los cambios que permanentemente tendrá que enfrentar. Blas

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    • Para Polioro.com de una sin tierra.

      Das a conocer este blog en POLIORO.com ?? la referencia es el articulo o tu comentario?? No dejas claro el proposito.,como la escrita de tus primeros renglones de
      tu comentario
      . .

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  2. roxanaaguilera dijo:

    Pienso q el capitalismo tiene errores ,pero no puede ser peor q el fidelismo.El fidelismo
    es insano,perverso ,manipulador ,tirano ,INQUISITOR , EXCLUYENTE q aborta la democracia del derecho y la justicia. Hoy es un dia en q vuelvo a sentir el peso
    del dictador cubano fidel castro sobre Cuba . Pobres nosostros los cubanos,q nos toco
    tener un dictador disfrazado de cordero .

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  3. […] en el mundo real te vas a asombrar de que eres quien escribió todo esto. ( Se refiere al articulo En Tierra de Nadie del Dr. Jeovany Jimenez Vega, publicado en su Blog CiudadanoCero […]

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  4. HOLA, Jeovany ! Ya otras veces me he puesto en contacto contigo, porque me encanta lo que escribes. Yo vivo en USA, y estoy de acuerdo contigo de que el capitalismo ni ha solucionado losproblemas del mundo, ni los va a solucionar. Tampoco lo hizo el comunismo, y todavia lo hizo peor.
    Pero los cambios en la Humanidad SOLO se han dado cuando una masa critica de personas creen en ellos. Entonces hay avances. Nunca el avance definitivo, claro, sino solo lo que en ese momento se puede avanzar.
    Creo que todavia no se ha llegado a la masa critica en Cuba para generar cambios a niveles profundos. Cuando haya mas gente como tu, o gente que por lo menos repita todos los dias «quiero qe haya cambios», entonces los habra.
    La apatia de los pueblos es a veces desesperante.

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  5. roxanaaguilera dijo:

    jeovany , leete la entrevista del Papa Francisco, al diario italiano «A stampa», denuncia la
    politica de libre mercado q nunca traera beneficio a los pobres.,tambien dice q el marxismo esta equivocado ,pero no se ofende q le rotulen asi . LLamar al ecumenismo ,» es su prioridad» ,y parece q los q estamos en tierra de «nadie» oiremos de cerca. no hay q tener miedo .ese es el mensaje del Papa Francisco, Lo escucho y estoy con ‘el ,desde mi profundo ateismo . Un abrazo .

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  6. Buenas entrada para el 2014 ,todos los cubanos merecen

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  7. Estimado Jeovany, acabo de conocer tu blog y me gusta mucho.

    En cuanto a.. esta reflexion.. pues es la reflexion de un curioso joven, sin embargo, creo que partes de un error conceptual que una vez alguien le llamo tercermundismo.

    El capitalismo no necesita de pobres para subsistir, el capitalismo, y la social democracia, se encuentran en dos dominios diferentes de, por llamarle de alguna manera, ciencias sociales.

    La pobreza, en los paises pobres, no es gracias al capitalismo sino a pesar del capitalismo. El capitalismo crea riqueza, no pobreza.

    Pero dejando de lado tan.. cancerigena etiqueta, el futuro del mundo esta, como me parece obvio, en la democracia, y en la libre empresa.. ponle el nombre que quieras a eso, pero los paises mas prosperos del mundo son los que mas libertades empresariales y civicas ostentan, los paises pobres casi todos, adolecen de esto.

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