El testimonio de dos médicos cubanos que fueron inhabilitados para el ejercicio de su profesión durante más de cinco años por canalizar ante su Ministerio inquietudes salariales de 300 profesionales de la Salud Pública. El Dr. Jeovany Jimenez Vega autoriza y agradece la divulgación de toda opinión o artículo suyo aquí publicado.

Carta a Raúl Castro Ruz.

Artemisa, 28 de enero de 2012.

Año 54 de la Revolución”.

A: Raúl Castro Ruz.

Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros.

Primer Secretario del Partido Comunista de Cuba.

Señor Presidente:

A los 35 años, quien le escribe ya había dedicado su juventud y la parte más elevada de sí mismo a la Revolución. Había escuchado de Fidel y de Usted que debíamos sellar un compromiso irrestricto con la verdad sin importar las consecuencias; era cuestión, se nos dijo, de poner la verdad por encima de todo. Le escribe aquel estudiante de las madrugadas en el puerto, el de los domingos en la micro al pie de los cimientos, el de las campañas en la agricultura, el de las juveniles marchas por La Habana; aquel joven que no dudó en entregarse cuando lo creyó necesario, aquel que ya graduado comenzó recibiendo menos de dos dólares de salario mensual y nunca claudicó.

Pero pasaron los años y llegó mayo de 2005; entonces Fidel anunció que se disponía un “aumento” de $ 48.00 pesos (menos de dos dólares) a nuestro salario mensual como médicos, lo cual fue percibido como algo irrespetuoso por la mayoría de nuestros trabajadores. Como tengo el precepto de que se debe hacer en cada momento lo que se crea justo y correcto, entonces creí ético hacerle llegar a nuestro ministro el criterio generado por aquella decisión entre mis colegas. La historia que siguió no la repito pues la debe conocer Usted desde la primera de las tres cartas que le hiciera llegar hasta hoy sin recibir respuesta.

Es aquí donde pregunto, con todo respeto, Presidente: ¿de qué modo engrana el gravísimo hecho de que permanezcan inhabilitados durante más de cinco años dos médicos por haberse dirigido a aquel ministro, con su discurso sobre nuestro derecho a expresarnos con libertad? ¿Vulneramos acaso la Ley cuando nos dirigimos, junto a un grupo de trabajadores, a la Dirección del ministerio a que pertenecíamos? ¿Qué relación tuvo esto con la docencia para merecer yo la separación arbitraria de mi Residencia en Medicina Interna? ¿Es una inmoralidad aspirar a vivir honradamente del salario emanado de mi esfuerzo? ¿Se establece acaso en nuestro Código Penal el ejercicio del criterio como un delito? ¿No es, sin embargo, ilegal que funcionarios políticos y administrativos amenazaran y coaccionaran a dos trabajadores, incluso en medio de su jornada laboral? ¿No es acaso ilegal e inmoral mentir y adulterar documentos para tratar de legitimar este atropello contra nosotros, aplicándose además una Resolución Ministerial que sanciona hechos lesivos al paciente cuando eso nunca sucedió? ¿No es una atrocidad colosal que el Jefe del Sindicato Nacional de la Salud haya dirigido personalmente aquellas reuniones escandalosas para expulsar del Sistema Nacional de Salud a dos de sus propios afiliados por haberse dirigido a su ministro?

Notará Usted que entre las arbitrariedades no le menciono mi expulsión del Partido Comunista, pues considero que este aquí es el único punto que no admite discusión. Siendo el partido una entidad política nadie cuestiona su derecho de apartar a alguien de su membresía si considera que rompió con su línea; sólo considero discutible que se aplicara la expulsión en lugar de la separación –términos conceptualmente distintos– cuando no cometí ninguna inmoralidad ni incurrí en ningún hecho de traición a la patria, porque no hay nada de traición, sino todo lo contrario, en hablar con sinceridad. Pero de esta decisión, evidentemente partidista, a suspender mi Residencia en Medicina Interna y luego disponer una sanción administrativa –por cierto, la más extrema– va una enorme distancia. Sólo espero que nadie ofenda mi inteligencia asegurando que el Partido nada tuvo que ver, que todo fue colegiado a nivel sindical –igual sería la gran barbaridad– y decidido en la Dirección del MINSAP, cuando es una descontada realidad que en todo se cumplió lo que el Partido dispuso desde su más alto nivel, ocupado entonces por Fidel Castro.

Hoy no pretendo cuestionar la sinceridad de sus promesas de implementar los profundos cambios que necesitamos con urgencia los cubanos bajo su gobierno, pues esto es algo que quedará confirmado o desmentido inexorablemente por el tiempo y, por lo mismo, está más allá del propósito de la presente e incluso de mis posibilidades personales. No seré yo, sino la Historia, quien lo juzgue. Pero eso sí, queda muy claro que no se puede hablar de libertad consintiendo ultrajes como este; que no se le pide sinceridad a un pueblo a la vez que se le atenaza con el miedo a semejantes atropellos, como no puede haber democracia donde se castiga el libre ejercicio del criterio; que no se es coherente cuando se habla de eliminar la impunidad si se protege al intocable consintiendo sus abusos de poder; que no es posible un Estado de Derecho donde se castiga brutalmente a alguien por algo que no hizo con el apoyo pleno de la Fiscalía; en fin, que no puede presumir de justo quien conoce de un abuso y lo permite, y menos aún cuando tiene en sus manos la potestad de redimirlo.

Señor Presidente: Usted puede reparar en parte aquel ultraje a nuestra dignidad. Digo sólo en parte, porque siempre quedará una dosis de sufrimiento humano y familiar que nadie podrá borrar después de una vivencia tan perturbadora, porque aun volviendo a trabajar hoy mismo, ¿cómo devolvernos cinco años alejados de la profesión que amamos? ¿Cómo borrar de la memoria aquellos días aciagos en que se nos juzgaba públicamente por algo que no hicimos? ¿Quién pagará por tanta brutalidad, por la difamación, por tanto déspota impune? Usted tiene la potestad de terminar hoy mismo con esta injusticia y desde el momento en que la conoce y teniendo la potestad para ello, no hace nada, pasa también a asumir su parte de responsabilidad en esta barbarie.

Incapaz de vivir al margen de mi tiempo, lo que fui ayer, por Fidel y por Usted lo fui, igual lo que soy hoy, y lo que seré mañana. Como en el resto de mi generación, en no poca medida ustedes moldearon en mí –es algo que no oculto– conceptos que sin embargo hoy me replanteo seriamente gracias a ustedes mismos. Siempre fui consecuente con la fe que me movió en cada momento, pero cuando intenté serlo con relación a esta verdad, no se me permitió. En lo personal lamento cuanto de incisivo y áspero lleven estas palabras pues, a pesar de todo, deseo mantener mi corazón a salvo del odio, pero no sé simular y como lo pienso lo digo; créame, siempre la realidad fue más dolorosa que cualquier palabra. No fui yo quien mintió, no fui yo quien simuló, no fui yo quien adulteró la verdad y timó a los trabajadores para salir del apuro; entre aquellos infames que sí mintieron se tendrá que buscar a los traidores. Que teman los trásfugas de la verdad, yo sólo soy un hombre sincero y vivo en paz conmigo mismo.

Agradece su atención:

Dr. Jeovany Gimenez Vega.

Especialista de 1er. grado en Medicina General Integral.

Residente de 3er. año en Medicina Interna.

Comentarios en: "Carta a Raúl Castro Ruz." (13)

  1. Interesante la carta, valentía en su exposición, pero esta será una más, recuerde la palabras de nuestro José Martí, «Ver en calma un crimen, es cometerlo.»

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  2. Si yo tuviera que contestarte muy honestamente y poniendome en el lugar de Raul Castro,si yo fuera el,te diria que tienes lo que te mereces por estupido,quizas sea por eso de ser honesto que se que no lo es ,es que no has recibido respuesta porque no hay otra.No hay intencion alguna en ofenderte pero o me abstenia de hacer un comentario como han hecho contigo tantos «funcionarios «gubernamentales o te escribia lo que creo,era mucho mejor creer en los reyes magos,en los cuentos de Disney que creer en una doctrina ,ideologia o como le quieran llamar que solo sirve a sus propios intereses( los de los amo) y que nada tienen que ver con la nacion y su pueblo,si no pudiste darte cuenta de eso en su momento perdoname amigo mio pero Fidel y despues Raul no son los culpables ,no se los reproches ,la edad de la inocencia hace rato la dejaste atras, ahora si quieres aferrarte a esos cuentos no esperes que otros como adultos te crean ,solo un retardado mental cree que la fantasia es realidad y como no creo que lo seas entonces es peor pues veo un oportunista mas llorandole a su amo que no lo castigue ,que no lo va a hacer mas,yo hice todo por ti y lo que me dijiste ,fue solo un error de mi parte y en fin de cuentas quien no tiene un desliz,perdoname.Si esa es tu postura.Si esa es tu postura deja de ser Quijotesco y borra a partir de hoy en tus escritos esa arrogancia que solo la verdad lleva en si misma y acostumbrate a servil y a agradar a tu senor y veras que recogeras tus propios frutos,si, esos que buscas y quien sabe seras parte del team medico de la casa real o de sus mas allegados ah y despreocupate del dinero que ganaras porque no sabras cuanto es pero tampoco lo necesitaras sacaras del arca publica todo lo que puedas necesitar,unos de esos cheques abiertos que da el Rey a sus destacados aduladores para gastar a manos llenas en lo que quieran,quien sabe si ya para entonces la fotografia no sea tu hobbie y sea un sputnick ,eso si ,convence siempre primero al raja y si le gusta la idea y tu ,lo tendras en el patio de tu casa.

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  3. Dr Jeovany, ya es hora de entender y comprender que el sistema que tiranisa a Cuba es tambien una ESTAFA que acepta y niega solo segun su conveniencia y no por principios de respeto y de derecho. Cuantas veces usted cree que algo semejante les a pasado a otros cubanos?, porque la gran mayoria del pueblo evita hacer comentarios y exponer; aun donde se supone se deberia, sus legitimos, cotidianos, repetitivos y todavia vigentes y peores problemas despues de mas de 5 decadas?. Cuanto mas hace falta para demostar la complicidad de las Instituciones en Cuba con la Dictadura?, Porque cree usted que para ser administrador, representante de alguna institucion o compania Cubana se TIENE que perteneser al Partido Comunista, cree que es solo por obra de la casualidad?. Todos los Cubanos deberian recibir salarios justos en moneda convertible, como se explica que el propio gobierno a creado una moneda deferente a la que el pueblo utiliza; es muy sencillo, todo lo que a esa Tirania les importa es controlar hasta el aire que respiras y solo dar migajas cuando y a quien les es conveniente. Yo estoy seguro de que si todos esos casos como el suyo se hicieran publico dentro y fuera de Cuba; con los debidos detalles para provar legitimidad, se estari desenmascarando una de las mas sutiles herramientas de reprecion que la Tirania «revolucionaria» a implementado todo el tiempo que a estado en el poder y no solo en su caso y recientemente. Esta demostrado que solo desean estar en el poder para imponer no para beneficiar al pueblo, esta demostrado que son unos incompetentes como dirigencia y unos ineficientes como sistema y ellos lo saben y por eso no les queda mas que ser efectivos reprimiendo, manipulando, terjiversando y aplicando todo tipo de miseria y doble moral hasta la saciedad; exepto, dar credito y beneficio al Pueblo (no digo su propio Pueblo porque los cubanos solo somos sus esclavos y eso tambien esta demostrado). Dr Jeovany si su caso fuera resuelto ( que obviamente seria por conveniencia y no por justicia pues de otra manera no habria estado tanto tiempo en la situacion que hoy usted esta) espero que no haga como dice el refran,» SI YO COMI, COMIO LA HABANA ENTERA» porque esa no es la realidad, seria seguirle el juego a unos CRIMINALES como hacen los cobardes. Todos los Cubanos donde quiera que esten admiramos y nos sentimos identificados con quienes como usted dan un paso adelante y denuncian lo que La Tirania pretende SILENCIAR, GRACIAS.

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  4. Dr. Jiménez.
    Creo percibir la verdadera intención que le mueve para tratar de hacerle llegar al jefe de estado cubano, los criterios que se conservan en la ut supra carta. En mi opinión pienso que es acertado su esfuerzo por hacer llegar sus reclamos a todos los niveles y HACERLO PUBLICO, por supuesto. Como todos sabemos, la odisea de su caso es una espina más en el alma de los cubanos que piensan como yo, por ejemplo, y le anticipo_ tal vez guiado por el sentimiento de solidaridad en medio de este dilema_, que tuve la desagradable experiencia semejante a la suya en mi propio pellejo. No me atrevo a vaticinar cómo terminará su caso, pero el mío no terminó bien a pesar de que el Derecho Positivo cubano me sostenía visiblemente, pero inerme frente a la brutalidad del «absolutismo cubano».
    Si me baso en mi propia experiencia no podría alentarlo con vanas palabras, pero retomando la idea inicial, es absolutamente ACERTADO que usted ponga en conocimiento de todas las figuras que adornan el entramado del poder político cubano, su verdadera intención_ y como apropiadamente expresa en su lectura_, sostener la misma en el Derecho. Ello, aunque usted y yo sepamos que no funciona en la práctica, le coloca en sus manos la única potencialidad que el caduco derecho cubano puede proverle.
    Una vez que usted haya colocado su queja en todos los sitios disponibles para ofrecer una respuesta y ésta no se materialize, entonces usted habrá demostrado el triste torbellino que envuelve a los cubanos.
    No desmaye en sus propósitos; son loables.

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  5. Saquiry el Malayo dijo:

    Esto le pasa por creer y tener confianza en comunistas. El unico bueno ES EL QUE ESTA EN EL CEMENTERIO.

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  6. Estoy de acuerdo con todos los cometarios,tengo 52 annios,32 de ellos en el exilio,cuando tenia apenas 13 annios practicamente un ninnio,le comente a mi padre comunista que lo que existia en Cuba era una dictadura de un grupo de asesinos que odiaban a su pueblo,que todo lo que predicaban de Batista es verdaderamente quien ellos eran y le dije a mi padre comunista que los tiranos solo se quitan a base de balas,la historia no miente al respecto,ni cartas, ni gladiolo, ni listas de firmas,a bombazos ,balas y machetes,ese es el unico idioma que conocen los dictadores y tiranos,

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  7. Olá no dia de hoje, encaminhe esta carta para nosso Conselho Federal de Medicina, com copia para Organização Panamericana da Saúde, seu escritorio regional aqui no Brasil, para dar a conocer o tratamento que se da nos Galenos cubanos que sem intereses políticos solicitan um justo aumento de salario. «Uma gota de agua e parte do oceano tambem»

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  8. Liborio Alvarez dijo:

    Dr. Jeovany.
    Lamento tu situacion, no es humano hacerte lo que te han hecho los que hasta el 2005 eran tus compañeros del PCC por no cumplir con la obediencia partidista y el centralismo democratico, te saliste de la raya y te hacen pagar. ¿ No aprendiste en tu formacion comunista que el partido se debe unica e incondicionalmente a su jefe supremo ?
    Tu eres una victima propiciatoria con la que, como siempre, se busca frenar las ansias de independencia que alguien mas, desde las filas comunistas pueda sentir , los prefieren molestos pero callados y obedientes , asi funcionan Fidel y su hermano. La unica verdad de la tirania castrista es que esta basada desde sus raices en una grandisima mentira y en mas de cincuenta años de estafa al pueblo cubano.
    Comprende eso y lleva con dignidad tu sancion, exije pero no mendigues.
    Te deseo suerte.

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  9. maillet dijo:

    tu eres muy valiente jimenez, como muy poco cubano que han tomado esta decision y han muerto por la liberta de cuba. y esa la tienes tu tambien corage y hagallas, no es para desectionarte pero pienso que el gobierno no le importa la vida de los cubanos, ya que pasa hambre el pueblo de cuba la medicina hay mala atension, y hay muchos medico que no ejerse bien su funcion como medico; tienes que pensar en tu familia……

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  10. Es una carta de sinceridad y desilucion, triste para una persona de su integridad y de su capacidad intelectual, la cosa mas triste y me hace provar mas pena todavia , que hay gente que crede que al govierno cubano le interensen los cubanos, mas triste y deprorable es saber cuantos cubanos se prestan para hacer una cosa simile a otros cubanos sabiendo que la verdad es otra no quiero profundizar porque seria larguisimo y doloroso hablar de tantos episodios que me hacen venir ganas de vomitar, somos estado nosotros los cubanos a sostener este govierno y nos han cambiado, no pensamos mas, como un pueblo que necesita su libertad , el egoismo y el miedo de perder algo material nos ha hecho hoy encontrarnos en esta triste realidad.. .. una cosa que veo en otros pueblos que no veo en el mio es que no somos unidos y de c…… , pocos como este medico que de manera muy inteligente le esta diciendo a todo el mundo y al govierno cubano…… que es un sistema de represion, donde la libertad en todos los sentidos no es admitida, por el simple hecho de che tienen miedo, miedo sobre todo ellos los que se creen intocables a perder su posicion.

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  11. […] ha venido representando una tensión latente, una sorda resistencia ante el omnímodo gobierno de Raúl Castro, que por otra parte se ha mostrado algo más pragmático que su predecesor en la conducción […]

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  12. […] Ver: Carta a Raúl Castro. Me gusta:Me gustaBe the first to like this. […]

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  13. […] de Estado, a José Ramón Machado Ventura, aún Primer Vicepresidente del Consejo de Estado o a Raúl Castro, nuestro Presidente, al que llegué a dirigir cuatro cartas sin recibir respuesta, sólo pregunto. Todas estas […]

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